Caminar juntos
Como andaluz , alzo mi mano con afán de juramentar lo siguiente: no sobrevivo gracias al PER o subvención parecida, al igual que tampoco paso mis días bailando sevillanas o viendo Se llama copla en el bar. Debo reconocer en contraposición, que de vez en cuando cometo la osadía de dormir una tímida siesta y convierto a mi antojo el castellano en un perfecto andalú. Además de haber seguido durante más de un mes prensa de todos los colores: El Periódico, Público, El País, El Mundo, La Razón, ABC, La Vanguardia, Diari Ara, Le Monde, Libération, The Guardian, Financial Times, New York Times, Frankfurter Allgemeine Zeitung y un largo etcétera. Así pues, después de estas necesarias advertencias , aviso de que, ya que nadie comenta nada, me voy a atrever a opinar sobre Cataluña y/o Catalunya. Les prometo que seré muy breve. En un tiempo comprendido entre la duración de la declaración de la República Independiente de Cataluña y las aberrantes siestas andaluzas habrán acabado de leerme....